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Planificar y diseñar correctamente una sala de secado es una de las partes menos consideradas y más importantes de cualquier instalación de cultivo.

Es importante proporcionar estabilidad a la hora de diseñar una sala de secado. Esto favorece un entorno ideal y permite la liberación gradual de la humedad de las flores. Los componentes clave que hay que controlar son la circulación del aire, la temperatura, la luz (o la falta de ella) y la humedad.

Eliminación de la humedad

La paciencia es uno de los factores más críticos en el proceso de secado. Hay que eliminar la humedad, pero no de forma agresiva. El proceso de secado se realiza mejor en un ciclo medio de catorce días a un ritmo constante para evitar que la cosecha pierda su color y potencia. Un secado apresurado reducirá la calidad del producto final, además de eliminar o dañar cualquier contenido de terpenos. Cuando la humedad se elimina demasiado rápido, la clorofila que queda en la planta se descompone, provocando el temido olor a “heno” o amoniaco. Además, si la cosecha no se seca de forma eficaz, se corre el riesgo de que se produzca crecimiento biológico, como moho negro o gris.

Control de la humedad

Cuando se diseña una habitación seca, Anden recomienda emparejar un deshumidificador (Por ejemplo: Anden A130) con un humidificador de vapor(Anden AS35FP). La combinación de estos componentes permite mantener el entorno en el “punto óptimo” para el secado. Ni demasiado rápido ni demasiado lento. Esto permite un curado real en lugar de una simple eliminación de la humedad.

Esta configuración también simplifica el control de la humedad. El control de humedad(Anden 5558), que viene con nuestra unidad de vapor, tiene la capacidad de controlar también el deshumidificador. Este control puede determinar fácilmente qué unidad es necesaria para que añada humedad o empiece a deshumidificar para mantener el ambiente correcto. Dado que sólo se utiliza el control de humedad singular, nunca tendrá una situación en la que los dos componentes están luchando entre sí.

Una cuidadosa consideración de cómo terminar adecuadamente su cultivo puede marcar la diferencia en su rentabilidad.

Si está pensando en construir, modernizar o modificar una sala de secado existente, póngase en contacto con uno de nuestros experimentados representantes, que le ayudará a determinar cuáles son sus necesidades particulares.